¡Escándalo en Elche! Tres conductores de autobuses urbanos han sido despedidos por consumo de drogas tras un sorprendente control aleatorio. La empresa decidió tomar acciones drásticas al confirmar los resultados de las pruebas, generando un impacto en el transporte público de la ciudad.
La Policía Local realizó pruebas de drogas en conductores, algo inusual sin que existieran quejas o incidentes previos. Esta medida reveló un problema preocupante en el sector del transporte urbano, sugiriendo la posibilidad de afectar a más profesionales.
Aunque los conductores dieron positivo, no se puede afirmar que consumieran durante su servicio. La detección de drogas en sangre es persistente y su eliminación lenta, lo que complica la interpretación de los resultados. La empresa considera inaceptable el consumo, independientemente de cuándo ocurrió.
Se desconoce si se implementarán más controles entre los empleados. Durante las pruebas, se reemplazó discretamente a los conductores para evitar interrupciones en el servicio y evitar preocupar a los pasajeros.
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