El nuevo documento establece restricciones y condiciones para la ubicación de instalaciones solares en zonas rurales
El vicealcalde y edil de Estrategia Municipal, Francisco Soler, ha presidido este miércoles una reunión crucial de la Mesa de Trabajo sobre regulación de energías renovables en el medio rural de Elche. En este encuentro, se ha presentado el documento que marca el inicio de la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), con el objetivo de regular las instalaciones de energía fotovoltaica.
Soler ha subrayado que el gobierno municipal «ha cumplido con el compromiso de establecer en menos de un año una normativa que regule la implantación de este tipo de instalaciones». Añadió que, a partir de ahora, los próximos pasos no dependen del Ayuntamiento de Elche. En concreto, se modificarán 10 artículos del PGOU y se introducirán dos nuevos relativos a la regulación del suelo no urbanizable.
La nueva normativa prohíbe la instalación de fotovoltaicas en suelo no urbanizable protegido y en suelo no urbanizable común que, debido a sus características medioambientales o su función de protección o ampliación de infraestructuras, no sean adecuados para la generación de energía renovable. Esto incluye huertos dispersos de palmeras, saladares y carrizales.
Además, se restringe la instalación en suelo perteneciente a la propuesta de infraestructura verde del suelo no urbanizable definida en la TRLOTUP. Esto abarca parques naturales, terrenos forestales, vías pecuarias, montes catalogados de utilidad pública y la zona de servidumbre de carreteras.
En el suelo no urbanizable común, la instalación de fotovoltaicas está permitida bajo ciertas condiciones. Según Soler, los paneles solares pueden ocupar un máximo del 50% de la superficie de la parcela. También se establece una distancia mínima de 100 metros a viviendas, parcelas residenciales, parcelas de equipamiento público y parcelas dedicadas a actividades terciarias de interés turístico rural.
Asimismo, se fija una distancia mínima de 100 metros al cauce del río Vinalopó y 50 metros de los barrancos. También se impone una distancia mínima de 500 metros a Bienes de Interés Cultural o Bienes de Relevancia Local. Además, se implementan medidas medioambientales relacionadas con la vegetación y la fauna.
El edil del área ha aclarado que esta modificación no afecta a las instalaciones de autoconsumo ni a las plantas fotovoltaicas que solicitaron licencia antes de la suspensión.
La Mesa de Trabajo, que ha participado activamente en la elaboración de estas regulaciones, incluye a representantes de los grupos políticos del PSOE y Compromís, la Asociación Provincial de Empresarios de Montajes Eléctricos y Telecomunicaciones de Alicante (APEME), la Asociación de Empresas de Energías Renovables y otras tecnologías limpias de la Comunidad Valenciana (AVAESEN), así como Cedelco, ADR y la Asociación de Vecinos de Santa Ana.
Con esta nueva normativa, el Ayuntamiento de Elche da un paso significativo hacia la regulación ordenada y sostenible de las energías renovables, asegurando la protección del medio ambiente y el patrimonio cultural local mientras fomenta el desarrollo de energías limpias.