El Ayuntamiento de Elche ha finalizado los trabajos de eliminación de 84 palmeras y 48 árboles en un total de 14 centros educativos del municipio, tras detectarse su mal estado en un informe técnico encargado en 2022. Esta medida, dirigida a garantizar la seguridad de la comunidad educativa, ha sido destacada por el alcalde Pablo Ruz como un acto de prevención basado en criterios rigurosos y sentido común.
El informe técnico evaluó 2.733 palmeras en zonas escolares, identificando la necesidad de actuar en 89 de ellas, lo que representa aproximadamente el 3% del total. Hasta el momento, se han retirado 84 ejemplares, mientras que las cinco restantes serán eliminadas en los próximos días en los colegios Menéndez Pelayo, Reyes Católicos y Giner de los Ríos.
Asimismo, en las últimas semanas se completó la retirada de 48 árboles en diversas escuelas infantiles municipales, como San Crispín, Don Julio y Don Honorio, junto a otros centros como Els Garrofers, Giner de los Ríos, Sanchís Guarner, Virgen de la Luz y San Fernando-Mediterrani.
Pablo Ruz defendió la actuación subrayando que “cortar una palmera puede generar mala imagen, pero nuestra prioridad es la seguridad, la prevención y el rigor técnico. La seguridad está por encima de cualquier cosa”.
El Ayuntamiento ya trabaja en el pliego para la reposición de los ejemplares retirados. Este plan incluye dos fases: la eliminación de los tocones y la plantación de nuevo arbolado y palmeras. En el caso de las palmeras, se utilizarán datileras macho de tamaño medio, seleccionadas por su resistencia y menor mantenimiento.
El presupuesto para estas actuaciones asciende a 165.149,44 euros, con un plazo de ejecución estimado de dos meses.
El alcalde también destacó el compromiso del gobierno municipal con la creación de espacios verdes en los colegios, señalando que estos no solo mejoran la estética y funcionalidad de los centros, sino que también contribuyen a reducir las áreas pavimentadas, ofreciendo sombra y un entorno más saludable para los niños.
Esta iniciativa se enmarca en una estrategia más amplia para garantizar entornos escolares seguros y sostenibles. El Ayuntamiento reitera su compromiso con la seguridad de los estudiantes, así como con la promoción de espacios educativos más verdes, adaptados al bienestar y las necesidades climáticas actuales.