El escenario de los procesos de oposición para acceder a plazas en el Ayuntamiento de Elche se ve marcado por reformas fundamentales. El edil de Recursos Humanos, José Navarro, ha anunciado un cambio significativo al eliminar la obligatoriedad del examen de valenciano en las oposiciones municipales, pasando este idioma a considerarse como un mérito, equiparándose así a otros idiomas evaluados.
El fundamento de esta modificación radica en la ausencia de una normativa legal que respalde la necesidad de incluir el valenciano como parte esencial de los exámenes de oposición. Esta decisión persigue no solo garantizar una igualdad de oportunidades para los candidatos, sino también agilizar los procesos selectivos.
En este contexto de transformación, se convoca una reunión entre la mesa general y los sindicatos para discutir los ajustes pertinentes. El objetivo primordial es determinar si se eliminará por completo la prueba de valenciano o si se redistribuirán de manera proporcional los demás criterios de evaluación.
Además de la eliminación del requisito de valenciano, los futuros procesos selectivos incluirán una nueva evaluación de adecuación de competencias, complementando la valoración de los conocimientos. La etapa siguiente implica la definición de criterios de evaluación adaptados a las demandas laborales del siglo XXI.
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