Las pedanías ilicitanas de Asprella y La Baia se llenaron de ilusión y alegría con la celebración de la tradicional cabalgata de los Reyes Magos, que comenzó con la «Crida als Reis de l’Orient» el pasado 4 de enero. Melchor, Gaspar y Baltasar, llegaron en majestuosas carrozas, guiados por una brillante Estrella de Oriente.
La cabalgata dio inicio en Asprella, donde los Reyes, acompañados por sus boatos, se embarcaron en un recorrido lleno de magia. La Estrella de Oriente encabezó la comitiva, iluminando el trayecto hacia La Baia. Por las calles, niños y adultos seguían emocionados el desfile, disfrutando de los colores, la música y los caramelos que los Reyes y sus acompañantes lanzaban al público.
Tras recorrer las calles de La Baia, la comitiva se dirigió al Centro Social, punto culminante del evento. Los boatos formaron un pasillo ceremonial, que los Reyes atravesaron con solemnidad hasta llegar al escenario. Allí, ante cientos de niños y familias, Melchor, Gaspar y Baltasar comenzaron a entregar los esperados regalos.
En cada rostro infantil se reflejaban emociones de asombro, esperanza y alegría. La atmósfera se llenó de entusiasmo y ternura mientras los niños recogían sus obsequios, envueltos en un ambiente de fantasía y empatía que caracteriza estas festividades.
La «Crida als Reis de l’Orient» y la posterior cabalgata no solo celebran la llegada de los Reyes Magos, sino que también refuerzan los lazos comunitarios entre las pedanías ilicitanas. Estos eventos, organizados con el esfuerzo y la colaboración de las asociaciones locales, son una muestra del compromiso de Asprella y La Baia por preservar sus tradiciones y transmitir la magia de la Navidad a las nuevas generaciones.
Crónica y fotos.: Paco Ciclón / AFPRESS