Durante el mes de febrero, hay programados, al menos, un desahucio a la semana en el barrio de Carolinas de Alicante y otras zonas de la ciudad. El Sindicat de Barri de Carolines pretende pararlos.
El próximo miércoles, 1 de febrero, el Sindicat de Barri de Carolines intentará parar el desahucio de María y su hijo, una familia con Informe de Vulnerabilidad, él con una discapacidad reconocida. El fondo buitre MAJORO REO SPAIN II, S.L. vuelve a intentar desahuciar a esta familia, como ya intentó el 8 de julio del año pasado, pese a no tener alternativa habitacional, ya que el único sueldo que entra en su casa son los escasos 750€ de la pensión de María. Dos días después, el viernes 3 de febrero, este colectivo volverá a luchar para que Jan, su mujer y sus dos hijos, no pierdan su casa a manos de otro fondo buitre, GLOBAL LICATA, S.A., y acaben en la calle.
Pese a contar con todos los requisitos que las acreditan como familias vulnerables, contar con el informe de vulnerabilidad emitido por Servicios Sociales del Ayuntamiento de Alicante, y tener a su cargo una persona con discapacidad reconocida en el caso de María, no se les ha ofrecido alternativa habitacional o servicio de mediación por parte de la administración para paralizar los lanzamientos que tendrán lugar el miércoles 1 de febrero a las 9:30 en la calle Garbinet nº16 y el viernes 3 de febrero a las 8:30 en la calle Torres Quevedo nº13, ambos en el barrio del Pla-Carolines.
Ante estos casos, el Sindicat de Barri de Carolines se encuentra esta semana organizándose para detener estos desahucios. El Sindicat de Barri de Carolines, continúa así con la tarea que se plantea como objetivo: luchar por un derecho a la vivienda real y defender colectivamente a las personas que pueden quedarse sin casa por el hecho que este derecho no existe en la práctica. Se quejan del hecho de que, pese a las palabras y promesas del gobierno, durante este último mes no han parado de comunicarse avisos de desahucio en la ciudad de Alicante y sus alrededores, sobre todo de viviendas propiedad de grandes tenedores, bancos, fondos buitre y de la SAREB. Denuncian que “a pesar de la supuesta existencia de una moratoria de los desahucios hasta finales de junio, aprobada en el RD 20/2022 el pasado 28 de diciembre, los jueces no están admitiendo los recursos de amparo presentados por las familias afectadas de desahucio pese a cumplir todos los requisitos”. Este hecho y la situación de falta de alternativa habitacional (casi inexistente parque de vivienda pública y con listas de espera colapsadas y situación de burbuja en los precios de pisos en alquiler, no adaptados a la situación de inflación y crisis en aumento) el aparato judicial está condenando a María y Jan, y sus respectivas familias, a vivir en la calle.
Frente a esto, y ante la falta de voluntad de la propiedad y las administraciones para la resolución del conflicto, el Sindicat de Barri de Carolines ha convocado una concentración en la puerta de estas viviendas, el mismo día y hora del lanzamiento, para intentar pararlos. Reivindica, “la moratoria antidesahucios se está demostrando insuficiente, no nos queda otra que seguir con la lucha en la calle, parando desahucios y exigiendo una Ley de Vivienda que realmente sirva para garantizar el ACCESO A LA VIVIENDA”.