El pasado 13 de enero, a altas horas de la noche, la Policía Local recibió una alerta urgente de un cliente preocupado sobre la presencia de menores participando en juegos de azar en una conocida cafetería ubicada en la calle Eugenio D’Ors. Este aviso desencadenó una rápida respuesta por parte de las autoridades para abordar la situación.
Al llegar al establecimiento, los agentes encontraron a dos jóvenes de apenas 17 años inmersos en el juego de las máquinas tragaperras. Uno de ellos estaba activamente jugando en una de las máquinas, mientras que su compañero, aunque no estaba jugando en ese momento, expresó su intención de hacerlo. La presencia de menores en este tipo de actividades, claramente prohibidas por la ley, generó preocupación y acción inmediata por parte de las autoridades.
Ante esta flagrante violación de las normativas de protección a menores y control de juegos de azar, los agentes procedieron a contactar de inmediato a los padres del joven involucrado para informarles sobre lo ocurrido. La noticia dejó consternados a los progenitores, quienes desconocían por completo la actividad en la que su hijo se encontraba involucrado.
La intervención policial no se detuvo ahí. Como resultado de esta acción ilegal, se levantó un acta-denuncia contra el propietario del establecimiento. Permitir la participación de menores en juegos de azar es una infracción grave, y las autoridades locales están comprometidas a tomar medidas firmes contra aquellos que incumplen estas leyes.
Este incidente sirve como un recordatorio contundente de la importancia de la vigilancia y el cumplimiento estricto de las regulaciones destinadas a proteger a los jóvenes de actividades perjudiciales para su bienestar y desarrollo. La colaboración entre la comunidad y las autoridades es esencial para garantizar un entorno seguro y saludable para todos.