Orihuela, 17 de octubre de 2024 – La concejala de Medio Ambiente de Orihuela, Noelia Grao, ha anunciado que, como parte del proyecto para mejorar el sistema de drenaje del Palmeral de San Antón, se ha procedido a la tala de siete palmeras adultas y al trasplante de dos jóvenes. Esta medida, según Grao, cuenta con la autorización de la Dirección Territorial de Cultura de la Generalitat Valenciana y forma parte de las acciones preventivas necesarias para salvaguardar el bienestar del palmeral.
El proyecto responde a la urgente necesidad de optimizar la capacidad de evacuación de aguas del Azarbe de las Fuentes, un canal que actualmente está saturado. Según el informe técnico, la acumulación de agua ha generado un aumento en el nivel freático, lo que ha provocado problemas en diversas infraestructuras y ha afectado negativamente tanto a la salud ambiental como a la vegetación de la zona.
La situación del palmeral
El incremento del nivel de agua subterránea ha derivado en un problema significativo para las palmeras, en particular para sus sistemas radiculares. La falta de oxígeno en las raíces está causando pudriciones, poniendo en peligro la supervivencia de estos árboles. Las palmeras jóvenes, que constituyen una parte importante del palmeral, se encuentran especialmente vulnerables ante esta situación.
La obra de instalación del nuevo sistema de drenaje tiene como objetivo prevenir una mayor afectación y garantizar la conservación de aproximadamente un millar de palmeras que forman parte de este entorno natural, considerado de alto valor ambiental. Aunque la tala de los siete ejemplares adultos y el trasplante de dos jóvenes es una medida drástica, Grao subrayó que se ha diseñado el trazado de la obra para minimizar el impacto en el palmeral. De hecho, el número de palmeras afectadas es el menor posible.
Un compromiso con la reforestación
La Concejalía de Medio Ambiente ha asumido el compromiso de reponer las unidades de palmeras taladas como parte de sus esfuerzos de conservación del patrimonio vegetal. Noelia Grao recordó que, si bien la tala de árboles es una acción delicada, en casos excepcionales como este, cuando se trata de obras de utilidad pública, está autorizada y es necesaria para preservar el ecosistema a largo plazo.
El trasplante y tala de las palmeras se realizaron antes del inicio de las obras y la entrada de la maquinaria pesada, lo que ha permitido ejecutar las medidas de conservación con antelación. La concejala también destacó que este proyecto es clave para garantizar la sostenibilidad futura del palmeral, permitiendo que siga siendo un espacio natural saludable para las próximas generaciones.
En última instancia, la modernización del sistema de drenaje busca solucionar los problemas derivados de la acumulación de agua, tanto en la infraestructura como en la flora del lugar, lo que supone un paso importante para la preservación del Palmeral de San Antón.
