Tanto los asistentes como los participantes y dueños de las aves apostaban grandes cantidades de dinero por adivinar que gallo sobreviviría a la pelea, pudiendo intervenir la policía algo más de 26.000 euros a los detenidos.
Tras un primer local o restaurante donde se sirve comida y bebida, se esconde tras una puerta un gallero con capacidad para unas 170 personas sentadas.
En la zona trasera de las gradas de la gallera o ruedo se han encontrado multitud de jaulas y bolsas trasportadoras, pudiéndose rescatar a tiempo un total de 18 gallos
La mayoría de los gallos rescatados han sufrido la amputación de crestas y espolones como proceso de preparación para lo que finalmente es su destino, los combates.