En su regreso al escenario político como presidente de los Estados Unidos, Donald Trump ha generado una nueva controversia al afirmar erróneamente que España es miembro del grupo BRICS y amenazar con imponer aranceles del 100% a las relaciones comerciales entre ambos países. Este desliz ocurrió durante una rueda de prensa en el Despacho Oval, en la que el mandatario fue interrogado sobre los gastos de defensa de los países de la OTAN.
Trump declaró: “España es una nación BRICS. ¿Sabes qué es una nación BRICS? Lo descubrirás. Si los países BRICS quieren hacer eso, está bien, pero les impondremos un arancel del 100%”.
Sin embargo, esta afirmación carece de fundamento, ya que el grupo BRICS está formado exclusivamente por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, países considerados economías emergentes. España, una de las principales economías de Europa, no pertenece a este bloque.
La declaración del mandatario ha suscitado numerosas reacciones en el ámbito internacional. Expertos en relaciones internacionales han señalado la necesidad de una comprensión más profunda por parte de los líderes políticos sobre las principales alianzas y organizaciones multilaterales. El error también ha provocado preocupación entre los aliados europeos, quienes ya habían enfrentado presiones de Trump durante su mandato anterior para incrementar sus contribuciones financieras a la OTAN.
En su mandato previo, Trump acusó a países como Alemania, Francia y España de no cumplir con los compromisos financieros asumidos dentro de la Alianza Atlántica, argumentando que Estados Unidos estaba asumiendo una carga desproporcionada. Este nuevo incidente podría tensionar aún más las relaciones diplomáticas entre Washington y sus socios europeos, quienes consideran vital mantener la estabilidad y el entendimiento mutuo en temas de seguridad global y comercio.
Raúl Velarde
