El pasado 26 de enero, la Policía Local de Elche detuvo a un hombre de 28 años por agredir físicamente a su pareja en su domicilio. La víctima, que presentaba lesiones en el ojo derecho y en el labio, tuvo que ser trasladada al hospital tras recibir asistencia médica en un centro de salud.
Los hechos se desencadenaron tras la llamada de una vecina que alertó a la policía de los gritos y ruidos de una fuerte discusión en el interior de un apartamento de la calle Francisco Tomás y Valiente. Al llegar al lugar, los agentes encontraron a la pareja en el portal del edificio, junto a la vecina que había dado la voz de alarma.
Según el testimonio de la vecina, los episodios de violencia verbal y física entre la pareja eran frecuentes desde hacía un mes. La mujer, visiblemente afectada, corroboró esta versión y relató a los agentes que la noche anterior su pareja había llegado a casa en estado de ebriedad y la había agredido, causándole lesiones en el rostro y rompiendo su teléfono móvil.
El hombre, por su parte, reconoció haber discutido con su pareja, pero minimizó la gravedad de la situación y alegó que la había golpeado en un forcejeo para quitársela de encima.
Ante las pruebas y testimonios recabados, la policía procedió a la detención del agresor y a su traslado a dependencias policiales. La víctima, por su parte, fue trasladada a un centro de salud, donde se le realizó un primer examen médico. Debido a la gravedad de las lesiones, fue derivada posteriormente al hospital para recibir atención especializada.
Este caso pone de relieve la lacra de la violencia machista, un problema que sigue azotando a nuestra sociedad y que requiere un firme compromiso por parte de las instituciones y de toda la ciudadanía para su erradicación.
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